Little Simz nos ha vuelto a sorprender con su último EP, Drop 7, consolidándose aún más como una fuerza imparable en la escena musical. Después de su aclamado álbum Sometimes I Might Be Introvert, la artista ha demostrado una vez más su versatilidad y habilidad para explorar diferentes sonidos.
Drop 7, a pesar de tener solo siete canciones, logra sumergirnos en un viaje sonoro diverso y emocionante. Aunque las pistas son cortas en duración, esto no disminuye su impacto; de hecho, parece ser una estrategia consciente para atraer a las generaciones más jóvenes que consumen música de manera rápida y efímera.
"Fever" destaca como una joya en el EP, nos llevó directamente al carnaval de Brasil con sus ritmos vibrantes y lírica en portugués. Es una experiencia sensorial que invita al cuerpo a bailar al ritmo de la energía contagiosa de Little Simz.
En "Power", Simz vuelve a sus raíces con ritmos pegajosos de UK grime, mostrando su habilidad innata para navegar en cualquier estilo. Por otro lado, "S.O.S" nos transportó a una aldea en África, fusionando sonidos tribales con elementos experimentales de una forma muy estimulante.
"Mood Swings" y "Torch" son la cereza del pastel. Son una experiencia más propia de clubes underground, con beats que podrían resonar en cualquier rincón del mundo. "Torch" incluso llega a un nivel industrial que lo hace perfecto para ambientes nocturnos intensos como el OXI o Kit Kat de Berlín.
Little Simz continúa demostrando su capacidad para reinventarse y deslumbrarnos. Drop 7 es una muestra de su habilidad para fusionar distintos géneros y llevarnos en un viaje musical inesperado. Su enfoque fresco y propuestas innovadoras hacen que su música sea adictiva y emocionante. Con cada lanzamiento, se consolida como una artista que no teme explorar nuevas fronteras y dejar una marca indeleble en la escena musical internacional.
Comments